Y no que laman por solo lamer, quieren lenguas expertas. La exigencia nace tras la gran fila de mujeres que se quejan porque no sienten nada cuando les practican sexo oral o dicen que simplemente no les gusta, normalmente aborrecen la practica porque las lastiman, sienten mucha cosquilla, han recibido malos comentarios por el olor, el color e incluso por el tamaño de sus labios. Y saben, a veces no los culpo, también hay muchas mujeres quejándose por el tamaño y el ancho de sus penes, cómo si la satisfacción sexual solo dependiera de ello.
He
escuchado muchas historias de mujeres infieles, su pareja no se las lame como
debería. Se sienten insatisfechas y buscan hombres que sepan disfrutar de
sus jugos, que sepan disfrutar de su olor, de su color, que les laman toda la
vagina, que metan su lengua por todos los huequitos, pero es que
nosotros también queremos que se nos practique sexo oral y queremos que
nos hagan garganta profunda; luchan contra las náuseas, la sumisión de sus
cabezas y la sensación extraña de la eyaculación en su boca, ¡ok!, lo último
muchas lo disfrutan, pero hay que decir que no todos se alimentan bien y esto
repercute en el sabor del semen.
A
veces pienso que el hecho de que algunos hombres no sepan practicar sexo oral,
llega a ser hasta cierto punto culpa de las mujeres. Son pocas las mujeres
que se conocen y saben exactamente qué es lo que disfrutan y que es lo que les
produce placer. Las mujeres no pueden esperar un excelente sexo oral si no nos
dicen exactamente lo que les gusta, lo que quieren; partamos del hecho de entender
que los hombres no somos adivinos.
Sin
embargo, también soy bastante crítico, nosotros no nos hemos interesado
por conocer el funcionamiento y la anatomía de la vagina.
Pensando
en todas esas inconformidades, traigo para ustedes un par de recomendaciones,
sugerencias y consejos muy útiles:
- La vagina no se chupa, se
lame. Si quieren chupar, cómprense un chupón, succionar la vagina es
muy mala idea, hace poco conocí la historia de una joven a quien su novio
le chupo con mucha fuerza la vagina, fue tal la fuerza, que le inflamo el
labio menor y ella no pudo caminar por tres días, estuvo en urgencias y
duró hospitalizada un día.
- Saber lamer el clítoris es
indispensable. Es bastante sensible, más o igual de sensible que la
punta del pene, estimularlo fuerte o brusco termina siendo doloroso o
incómodo y si lo hace muy suave, termina proporcionando cosquillas. ¿Han
notado como ellas retiran la cabeza de los hombres con fuerza cuando les
practican sexo oral? Ellos muy emocionados no se retiran y ella termina
por retirar la pelvis, ¡EY, SUPERMAN! La estas lastimando, lo último que
estás haciendo es proporcionarle placer. Aprende a estimular el clítoris.
- Pasa la lengua por toda la
vagina y no olvides besarla. Existen hombres que solo abren la vagina
y se dedican a lamer el clítoris. ¡Es rico, pero no es suficiente!
Recorran la vagina, deléitense con su sabor, eso lo disfrutamos muchísimo
las mujeres.
- Introduce los dedos cuando ella
esté bien lubricada, el sexo oral mientras las masturban es casi hacerlas
sentir el cielo. Usar los dedos índices y medio está perfecto, aunque
algunas mujeres prefieren el uso de tres dedos. Muevan los dedos
permaneciendo en la vagina, encojan y estiren los dedos, si los sacan e
introducen descontroladamente, pueden rasguñar y cortar la lubricación.
- Mantengan un buen ritmo. El
ritmo es muy importante, ella no alcanzará el orgasmo si el ritmo es
intermitente. Lo ideal es empezar
lento y terminar rápido.
- Encuentren una posición
cómoda. Y no solo cómoda para quien recibe el sexo oral, sino también
para quien lo practica. Tener un orgasmo necesita de concentración y
estimulación, no cambies de posición. Recomiendo en cuatro, el 69, parada
de manos y sentada en la cara.
- Si ella no está muy lubricada y
no dispones de lubricantes, escúpela. Pero no lo hagas de forma
devastadora, agresiva o asquerosa, esto pudiera cortar de inmediato el
momento de cachondez.
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